Big Fish... ¿La viste? ¿La entendiste? ¿Te dejo frío? ¿No la entendiste? ¿Te aburrió? ¿Te pareció una completa locura sin sentido, sin pies (sin ZAPATOS) ni cabeza, ni cabo ni rabo? No importa. Suele pasar. Yo aún no sé si la entendí, pero da igual, es Tim Burton. No hace falta que os esforcéis, los locos hacen locuras, aunque maravillosas.
Hay muchos días especiales (hoy es uno), hay bastantes películas especiales (ésta es una), pero personas especiales, con ese aura celestial que las envuelve, existen pocas. Por suerte yo conozco a una. Soy un suertudo porque realmente me aprecia y puedo abrazarla si me da la gana. Y me puedo permitir dedicarle esta entrada. Pues eso, para ti, una película especial en un día especial, porque eres especial. Un beso, Elena.
El reparto es extenso pero voy a nombrar solamente a Ewan McGregor, que no es la primera vez que aparece por aquí ni la última. Simplemente es bueno. No hace falta que diga más. Y Marion Cotillard, que ya la nombré en Origen y la verdad es que cada vez me gusta más. Está empezando a conquistarme, sibilinamente, desde la pantalla, con su acento francés... Ah, y Elena Bonham Carter, esposa de Tim Burton, Bellatrix en Harry Potter, también lo hace bien, como bruja y como amante que espera.
Big Fish es un cuento con moraleja... ¿Cuál? La que tú quieras. Tiene todos los elementos de un cuento, como los de nuestra infancia. La bruja, el gigante, el aventurero que no se detiene ante nada, el bosque siniestro, el pueblecito mágico, el circo...
Cuando te dicen frases como ésta: "Eras un pez grande en un estanque pequeño, pero esto es el océano... y te estás ahogando." Cualquiera se hundiría en el estanque, pero él no, de eso nada. Sigue adelante, con zapatos o sin ellos.
Estás muy seguro de que todo es mentira, o no. Poco a poco ves luz en esas historias y dudas, o no. Pero no importa ¿Qué más da si es verdad o mentira? ¿Cómo eres más feliz? ¿Con una verdad podrida o con una mentira adornada? ¿No será mejor que nos engañen? La ignorancia atrae la felicidad, el conocimiento problemas. O no.
10 años son siempre 10 años. ¿Da lo mismo 8 que 18, 18 que 28, 28 que 38?
Las historias son lo que son por las veces que las cuentas, no por lo que digan. Se hacen grandes solas. Cada uno intenta vivir su historia, recortarla, pegarla, ajustarla y adornarla, sin tapujos, si es menos creíble mejor. Decidir cómo vivir, decidir cómo morir e incluso decidir no morir. Ser libre, ser INMORTAL, que te recuerden y haber dejado huella en este mundo; una bonita manera de remontar el río con un trabajo bien hecho.
Felicidades Manny.
