domingo, 14 de noviembre de 2010

Trilogía de Jim Carrey (parte II) El color de este rotulador es ¡¡¡...Rrrrrr...!!!


Y vamos a seguir con el pequeño tributo a Jim Carrey con una peli bastante conocida como es Mentiroso compulsivo. Es una comedia de las de toda la vida, aunque comedia es un nombre demasiado serio para esta pelicula. Su categoría verdadera es: Peli de risa. Porque todo el rato produce eso, risas, por todos lados.

Menuda peli. Puedo asegurar que es la comedia que más veces he visto, de esas que tienes en cinta y rebobinas millones de veces hasta que el viejo vídeo de mamá no da para más.

Las caras de Jim Carrey en esta película son insuperables. Su boca es un pedazo de plastilina, moldeable con posibilidades infinitas para cada ocasión. Sobre todo por eso, y por el guión original, hacen que la forma de contarlo de Jim Carrey y como se adapta en cada escena sea algo que recuerdas siempre. Estoy casi seguro de que no hay un lapso de tiempo superior a 3 minutos entre escena y escena sin risas. Las bromas están acumuludas en toda la película, y a la vez muy bien repartidas.

Hace mucho, pero muchísimo tiempo que no la veo. Pero siempre estoy dispuesto para repasar y otorgarle el visionado oportuno, a pesar del agobiante TIEMPO que me come las entrañas. Aún así no me hace falta visualizar para imaginar en mi mente las escenas, inmortales, grabadas a fuego: Cuando se da una paliza a sí mismo, la Garra, escenas increíbles del juicio, su oficina y el fatídico rotulador...

Es injusto y pido disculpas, pero me faltan palabras y tiempo para expresar como me dolía cada músculo abdominal, (no se ven, pero los tengo) tras ver esta maravilla. Esta obra que yo consideraría la mejor comedia que he visto, y la mejor película de Jim Carrey. Sí que es la mejor comedia, pero no es la mejor película de Jim Carrey, porque lo siguiente es la apoteosis del cine. Lo mejor está por llegar. Su papel definitivo... El show de Truman.